Descubren en Teruel un alga fósil tropical de 85 millones de años

 

Paraje de Valdeconejos en el que ha sido localizada el fósil de la nueva especie de algas.Paraje de Valdeconejos en el que ha sido localizada el fósil de la nueva especie de algas.Heraldo.es

Tal como detalla el diario Heraldo, el descubrimiento de una alga verde microscópica que vivió hace 85 millones de años ha servido para constatar que en aquel momento las comarcas de las Cuencas Mineras y del Maestrazgo eran una zona costera de clima tropical comparable a las actuales costas del estado de Florida (Estados Unidos), un entorno muy distinto de las tierras secas y de duros inviernos que las caracteriza actualmente.

El paleontólogo Diego Torromé, que forma parte del grupo de investigación Aragosaurus de la Universidad de Zaragoza, localizó en rocas calizas de Valdeconejos, una pedanía de Escucha, una nueva especie de alga, la ‘Milanovicella canadillana’, que tuvo su auge en el Jurásico y el Cretácico. El hallazgo acaba de ser publicado en la revista científica ‘Cretaceous Research’.

La nueva especie de alga era una planta unicelular que fue localizada durante un proyecto de investigación sobre el clima y el entorno geográfico que, hace 85 millones de años, dominaban el territorio que ahora ocupan las Cuencas Mineras y el Maestrazgo. El procesamiento de rocas calizas en busca de pistas sobre las condiciones de aquel medio ambiente permitió identificar el alga.

La nueva planta acuática presenta un aspecto estrellado, aunque para identificarla fue necesario recurrir al microscopio porque es invisible a simple vista. El catedrático de la Universidad de Zaragoza y director del grupo Aragosaurus, José Ignacio Canudo, explica que estas algas, a pesar de sus modestas dimensiones, jugaron un papel decisivo como base de la cadena alimentaria y, además, son uno de los principales ingredientes que, con el paso de millones de años, han dado lugar a grandes capas de roca calcárea.

El grupo Aragosaurus informa de que la ‘Milanovecella canadillana’ permite "ampliar la diversidad de algas calcáreas durante el Cretácico tardío, un periodo en el que la diversidad de estas especies era muy escasa". Pero la principal aportación de esta planta microscópica radica en posibilitar la reconstrucción del ambiente en el que se desarrolló. Las especies que son sus parientes más cercanas se desarrollan actualmente en ambientes marinos y costeros de clima tropical, "lo que refuerza la teoría de que, durante es época, en las comarcas de las Cuencas Mineras y el Maestrazgo predominaba un ambiente costero similar a lo que hoy se encuentra en la bahía de Florida (Estados Unidos)".

Canudo indica que las rocas en las que aparece el alga se cortan, para su investigación, el láminas muy finas –de unas pocas micras–, lo que las convierte en un material transparente que permite ver sus componentes. Al analizarlas, "casi por azar", se detectó la diminuta alga estrellada de Valdeconejos.

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